Miércoles Santo 2012

Parecía casi imposible que pudiésemos tener una jornada de Miércoles Santo completa debido a la incertidumbre creada desde los días de vísperas con respecto al tiempo. Hasta entonces eran ya 20 las Hermandades que debido a la lluvia se habían quedado en sus respectivos templos,  pero sin embargo las nubes dieron una tregua y pudimos realizar nuestra estación penitencial a la Santa Iglesia Catedral. 

Desde muy temprano se abrieron las puertas de nuestra Parroquia de San Vicente Mártir, para que todos los Hermanos, devotos y cofrades en general puediesen visitar nuestros titulares antes de que empezase la Santa Misa de Hermandad.

Tras ella, muchas visitas de instituciones y personalidades varias, destacando la de Monseñor Asenjo Pelegrina, Obispo de Sevilla.

Tras el cierre de la puerta, la “vacía” Iglesia denotaba día importante. 

Una vez más los nazarenos de la Hermandad de Las Siete Palabras iban a reunirse junto con sus titulares, como ya lo hacían en el siglo XVI con sus túnicas blancas de cola con escapulario Carmesí, por las calles de Sevilla.

 

  

Cuando la romántica Cruz de guía de Las Siete Palabras se paseaba airosa por la Plaza de La Campana, eran ya unos treinta minutos de retraso los que el día acumulaba, hecho que provocó la coincidencia en la Plaza del Duque del inicio de nuestra Archicofradía, con la Hermandad del Cristo de Burgos mientras esperaban, puntuales, a que la Virgen de la Caridad, de la Hermandad del Baratillo, entrase en carrera oficial. Sin embargo y pese a los retrasos, el cortejo discurrió con total normalidad. 

 

Las andas procesionales del Señor de la Divina Misericordia, al igual que en 2011, llevaba claveles rojo sangre colocados magistralmente por los herederos de Ramito, que hacía contraste con la tradicional alfombra de lirios sobre los pies del Señor, donados por  Antonio Gómez y por Maruja Pérez Fernández. La portentosa talla de Felipe de Ribas lucía la túnica color corinto bordada en oro que daba mayor empaque si cabe a la Imagen del Divino Nazareno. 

Seguidamente, junto a la Virgen de los Remedios y las tres Marías perfectamente vestidas, se alzaba el crucificado más elevado de la Semana Santa sobre la decimonónica canastilla exornada, esta vez, a base de rosas y claveles rojos salpicados con lirios. Le acompañaba por segundo año la formación musical de Esencia que, como todos sabéis, sigue los pasos que marcase la banda de Bomberos en Málaga y posteriormente la Policía Armada aquí en Sevilla. Llamativa fue la bajada por Cardenal Cisneros del calvario de Las Siete Palabras, a los sones de Silencio blanco una marcha moderna que se ha hecho un hueco en los repertorios más clásicos. El conjunto, inalterable al paso del tiempo, mostraba de forma clara y concisa una Semana Santa de tiempos pretéritos.

Tras Él y como colofón a todo el cortejo venía la Santísima Virgen de la Cabeza cuyo paso, comandado por Rufino Madrigal, dio lecciones en la complicada maniobra de la salida y la entrada de la Parroquia de San Vicente Mártir. La Imagen, que lucía hermosísima, estaba ataviada con tul de sedas y blonda en oro del siglo XVIII,  y presentaba la novedad de volver a lucir, tras cinco años, la toca bordada por Carrasquilla en 1982. Además estrenaba una gargantilla en filigrana donada y un broche con el nombre de la imagen. También es digno de alabar el cuidado repertorio que la Banda de Nuestra Señora del Águila, del vecino pueblo de Alcalá de Guadaira  interpreto tras la Santísima Virgen, compuesto en su mayoría por marchas como “Juana de Arco” y “Valle de Sevilla” y por autores de gran renombre como Gamez Lasserna, Font de Anta, Pantión, Farfán, Turina o Cebrían entre otros, demostrando toda una profesionalidad y calidad impecable.

Indicar el importante incremento de nazarenos que hemos obtenido con respecto al año 2.011. Esperamos no sea un dato puntual y que sigamos viendo año tras año un incremento de túnicas. Ya que acompañar a nuestros Sagrados titulares, con nuestras antiquísimas y personalísimas túnicas dignifica tanto a los propios hermanos como a la propia Hermandad.

 Felicitaciones a las personas que organizan a la Cofradía, este camino parece ser el acertado.

Fotografías:  Manuel Serrano Hidalgo

Mariano Lopez Montes

Mª Victoria Mellado Ramos

Conchi Escudero

Práxedes Sánchez M.