Una muchedumbre se agolpaba bajo los naranjos alrededor de la puerta para contemplar la salida del que, por entonces, era el único paso con el que la Cofradía hacía Estación de Penitencia.
La foto podría datarse entre el año 1931, en que se estrena los respiraderos realizados por Francisco Vélez Bracho, y 1950, año en que comienzan una serie de cambios reversibles en el paso y las propias imágenes que pocos años después fueron solventados.
Llama especialmente la atención dos detalles fundamentales. El primero es la corona de la Virgen , que se presenta en su concepción original con los imperiales. Y el segundo detalle es la altura de los codales que los priostes de la época solían colocar en los candelabros del paso.
Fotografía: Archivo Alejandro Montilla
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